LA FANTÁSTICA FÁBRICA DE SUEÑOS IMPLANTADOS

   El 52% de los veteranos de guerra diagnosticados con estrés post traumático afirman tener habitualmente pesadillas. Durante la vigilia son capaces de esconder en qué se han convertido pero “el mundo del sueño se convierte en una experiencia aterradora y fuera de control con consecuencias en la vida consciente”, afirma un informe realizado en torno a los veteranos de Vietnam.

   Para solucionar esto se ha delineado un proyecto terapéutico de “creación de imágenes sanadoras personalizadas para contraatacar el impacto de las pesadillas”. La idea es que estos “sueños de poder” sean vistos por los veteranos de combate en sus laptops, con goggles y aparatos de neurofeedback para “reforzar nuevas imágenes neurológicas”. Es decir, los soldados aprenderían a superponer estas nuevas imágenes sobre sus pesadillas y recuerdos, al recibir retroalimentación de los efectos que tienen en sus ondas cerebrales.

   Los soldados construirán su nueva imaginaria con un software similar al usado en Second Life, en el que diseñarán sus secuencias oníricas para desarrollar “estados físico-emocionales que contrarresten la respuesta reactiva de estrés inherente a las memorias del trauma”.

   Para convertir esas pesadillas en sueños plácidos, el Pentágono está trabajando en un proyecto digno de Hollywood (recuerden "El origen", película en la que los protagonistas son programados para ejecutar sus misiones en sueños). El proyecto se denomina Power Dreaming y lo ha puesto en marcha un hospital naval del estado de Washington, el Naval Hospital Bremerton, en el que los veteranos son ‘tratados’ de sus pesadillas con un contraataque en forma de sueños placenteros.

   El sistema, del que se conoce poco, consiste en unas gafas 3D en la que se proyectarán imágenes placenteras, tal vez de familiares y allegados, de modo que el cerebro vaya acostumbrándose a sus ‘amigos pixelados’ y disipe los recuerdos de disparos, muertes y dolor.

   Power Dreaming, el contundente nombre del ingenio, utiliza un sistema denominado bio-feedback, usado tradicionalmente para ayudar a los meditadores a alcanzar ondas theta durante su práctica. En el caso del "soñador", el paciente enviará datos en tiempo real de sus niveles de estrés (ritmo cardíaco, respiración) al dispositivo, de modo que éste pueda anticiparse a la llegada de las pesadillas.

   Según el contrato de Defensa al que ha tenido acceso la revista americana, lo ideal sería que estos ‘sueños terapéuticos’ pudieran descargarse en los portátiles y gafas de entrenamiento 3D, de modo que el veterano pueda trabajar gradualmente en la fuerza de esas nuevas imágenes neurológicas”, según reza la presentación del programa. El Ejército de EEUU ha invertido medio millón de dólares en la primera fase del experimento.

Ilustraciones: Uniformed Services Academy of Family Physicians.

Posibilidades de comercialización: 80%. 

Una parte nada desdeñable de los inventos que disfrutamos hoy en día tienen su origen en investigaciones militares, incluyendo el GPS, el microondas o el correo electrónico.

¿Quién no estaría dispuesto a tener junto a la cama un “soñador” de felices sueños?

   Esto es programación mental pura. Es fascinante y aterrador imaginar hasta dónde puede llegar esto, con el Ejército capaz de meterse en los sueños (ese supuesto fuero íntimo impenetrable). Aunque por ahora con una finalidad sanadora, no queremos luego ver esos aparatos en las escuelas “como recurso educativo.” Por otra parte, poder diseñar tus propias imágenes, paisajes oníricos de alta definición, sincronizados y sintonizados con tu arquitectura neurobiológica, en concordancia con tus patrones cerebrales, podría ser una poderosa herramienta de entrenamiento (un poco como la que usa Morpheus con Neo en Matrix). Aunque todo esto evidentemente podría ser mejor usado con el mero poder de la imaginación, la realidad es que, como en el caso de los soldados traumatizados, no todas las personas tienen el control suficiente de sus propias imágenes para convertirse en “arquitectos” de mundos mentales.

   Tal vez este proyecto se conecte con la investigación que hace DARPA sobre la influencia de las narrativas en la neurobiología humana. ¿Veremos pronto tecnología para implantar sueños profundamente en las redes neurales bajo una construcción narrativa estratégica?

   Al mismo tiempo podemos ver estas mismas ideas siendo sutilmente implantadas en la población común gracias a los profesionales del yoga y otras disciplinas nuevaristas, donde se sugieren métodos para programar los sueños como un medio para "materializar" de alguna manera las actitudes necesarias para conseguir los logros en la vida despierta.

 Ahora bien, las personas que hoy son capaces de "visualizar" lo que desean para "soñarlo programadamente" y así "provocar" los resultados que desean en la vida real, no serán acaso las primeras en acceder voluntaria y alegremente a los "beneficios" de un programa de auto-control-mental? 

ESPANTOSO SÓLO DE PENSARLO.

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Publicado por: Anunciadora de Sión

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