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domingo, 3 de enero de 2016

VENENOS EN EL CUERPO - MERCURIO PARTE 2





Continuación y finalización de la Primera Parte:
VENENOS EN EL CUERPO - MERCURIO PARTE 1




EL MERCURIO EN LAS VACUNAS


   Hay un aspecto que es más grave y debe ser de rápido abordaje por las autoridades de salud pública. La utilización de derivados orgánicos de mercurio utilizados en vacunas pediátricas como conservantes (coadyuvantes). En Europa y Estados Unidos, ya se han reportados casos de neurotoxicidad en tras la aplicación de estos preparados en niños pequeños, surgiendo una exigencia ciudadana de revisar los "beneficios" y "consecuencias" de las vacunaciones sistemáticas, que acostumbramos desde hace unas décadas en la mayoría de los países del mundo.


   Hay reportes que relacionan riesgos múltiples y complejos de la utilización en general de las vacunas, y en particular los relacionados a la presencia de mercurio en ellas. La complejidad de los efectos adversos no es sólo con la naturaleza de ese fármaco excepcional llamado vacuna en el que encontramos antígenos (bacterias, virus), conservantes (mercurio), adyuvantes (aluminio) y otras sustancias, sino también con las características del método, entre las que destaca la administración de vacunas combinadas (3,4, 5, 6 ó 7) a edades muy tempranas; aumentando la concentración del mercurio en el cuerpo de los niños.






   Señala el Doctor Juan Manuel Marín, especialista español en problemas de la vacunación, que "a la vacuna Triple Vírica se le considera una droga de alto riesgo en relación a las trombocitopenias (bajada de plaquetas) y también se la relaciona con síndromes autistas y enfermedad inflamatoria intestinal; a la vacuna contra la tos ferina se la ha relacionado con muerte súbita del lactante, con afecciones neurológicas y respiratorias; la antihepatitis B, con esclerosis múltiple y otras afecciones neurológicas; a la vacuna contra la difteria se la relaciona con síndromes nefróticos".


   Consideramos que se debe informar sobre los posibles efectos adversos de estas vacunas y su alcance limitado en cuanto al beneficio que reporta, para que los ciudadanos decidan su opción sanitaria con conciencia. Reflejamos las recomendaciones hechas por un grupo de farmaceutas en Pharmaceutical Care España 2000, como conclusión a una valoración de la seguridad de las vacunas por su contenido en Timerosal como conservante, derivado del mercurio: 



  • El timerosal es un conservante potencialmente tóxico, especialmente durante los primeros 6 meses de vida. 
  • Es recomendable prevenir la exposición en las mujeres embarazadas al timerosal debido al rápido desarrollo del cerebro del feto, muy susceptible a la toxicidad. 
  • Siempre elegir alternativas exentas de timerosal; cuando esto no sea posible seleccionar aquella presentación que menor cantidad de timerosal presente. 
  • Siempre vacunar, ya que a pesar de la toxicidad del mercurio está ampliamente demostrado que el riesgo de no-vacunación de los niños supera enormemente al riesgo teórico de la exposición a vacunas que contengan timerosal. Es fácil deducir de que es un riesgo potencial y que no se está tomando en cuenta a la hora de vacunar de manera sistemática a toda la población. Recordemos que para llevar y tener una vida sana tenemos que cuidar nuestro entorno. Es ilusorio pretender corregir los estragos de la pobreza con vacunas y medidas correctoras superficiales. Agua potable, alimentos sanos, mejoras en las condiciones de vida y menos cajas cargadas de vacunas es lo que precisa el país como política de salud pública. 









PLAGUICIDAS Y BIOCIDAS QUE CONTIENEN MERCURIO



   Se han usado compuestos inorgánicos y orgánicos de mercurio como plaguicidas para numerosos usos. Los compuestos se han usado en el tratamiento de semillas, para controlar las algas y el limo en las torres de enfriamiento y en las plantas de celulosa y papel, como aditivos de pinturas marinas y pinturas y recubrimientos al agua, para cubrir heridas en los árboles, para proteger las papas y manzanas para semilla, en tratamiento de telas, en lavandería, y otros.

   En Australia, el plaguicida Shirtan, que contiene 120 g de mercurio por litro, en forma de cloruro de metoxietilmercurio, aún tiene registro de uso como fungicida para controlar el mal de la piña en los cultivos de caña de azúcar.

   Muchos plaguicidas que contienen mercurio han sido prohibidos y restringidos debido a su toxicidad para las personas, su capacidad para contaminar la comida y los piensos, y su toxicidad para los organismos acuáticos. Los casos más graves de toxicidad de los plaguicidas que contienen mercurio están asociados al uso de compuestos de mercurio como tratamientos para las semillas, utilizados en forma amplia para proteger las semillas contra la infestación por hongos.




   En el puerto iraquí de Basra ocurrió en 1971 un caso grave de envenenamiento por plaguicidas, mencionado a veces como el Desastre de los cereales envenenados de Basra. Un cargamento de 90.000 toneladas métricas de cebada estadounidense y trigo mexicano llegó a ese puerto para ser usado como semillas. Los cereales habían sido tratados con metilmercurio como antimicótico, para evitar que se pudrieran. Se suponía que estaban destinados a los agricultores y tenían advertencias impresas en inglés y español en las bolsas. Sin embargo estos idiomas no eran de uso general en la ciudad puerto y una gran cantidad de grano se vendió a nivel local como alimento. Se calcula que como resultado del envenamiento por mercurio murieron 10.000 personas y otras 100.000 quedaron con daño cerebral grave y permanente.

   Las siguientes son otras aplicaciones del mercurio como plaguicida o biocida que aún pueden estar en uso:
  • Aditivos para pinturas: A veces se agregan compuestos fenilmercúricos y acetato de mercurio a la pintura, como fungicidas, para evitar el crecimiento de moho y mildiú. Estas pinturas ya no se usan en Estados Unidos y Europa Occidental, pero pueden estar usándose en otras regiones.
  • Plantas de celulosa y papel: A veces se agrega acetato de fenilmercurio a la celulosa en el proceso de fabricación de papel, como fungicida o para evitar la formación de limo. Debido a que la pulpa de papel está tibia y es rica en nutrientes, pueden crecer hongos y mohos en la pulpa y atascar la maquinaria, a menos que se controlen. Para este fin se usan grandes cantidades de acetato de fenilmercurio. Esto puede contaminar el agua de descarga de la planta de celulosa y también los mismos productos de papel. 
  • También se agrega acetato de fenilmercurio a la celulosa almacenada para embarque. Casi no hay información que permita saber si esta aplicación del mercurio sigue en uso.
  • Antibióticos de uso tópico: El mercurocromo, la tintura de mertiolato y otros antibióticos de uso tópico contienen mercurio y han sido utilizados para el tratamiento de heridas en las personas y los animales. Estos antibióticos siguen en uso, especialmente para aplicaciones veterinarias.



EL MERCURIO EN LOS COSMÉTICOS


   Los productos cosméticos como cremas, lociones y jabones se comercializan algunas veces con la promesa de que su uso aclará el color de la piel o quitará las manchas oscuras. A menudo estos productos contienen mercurio en forma de cloruro de mercurio y/o mercurio amoniacal. Ambos productos son carcinogénicos. Los cosméticos para aclarar la piel que no contienen mercurio, a menudo contienen hidroquinona (C6 H6 O2), que también es altamente tóxica.

   Por lo general, mientras más pigmento melanina tiene una persona en su piel, más oscura es ésta. Los cosméticos que contienen compuestos de mercurio o hidroquinona hacen que la piel se aclare, inicialmente, al inhibir la producción de melanina. En el largo plazo, sin embargo, estos productos llenan la piel de manchas, lo que a su vez hace que la persona use más cantidad del producto, en un esfuerzo por emparejar el color de la piel. Los cosméticos que contienen mercurio fueron prohibidos en muchos países, pero aún siguen disponibles a través de la venta clandestina. Parecen ser especialmente populares en muchos países asiáticos y africanos.




   Una directiva del año 2000 de la Unión Europea estipula que el mercurio y sus compuestos pueden no estar presentes como ingredientes en los cosméticos, incluyendo jabones, lociones, champús y productos blanqueadores de la piel (excepto las sales fenilmercúricas para la conservación del maquillaje para los ojos y los productos para quitar el maquillaje para los ojos) en concentraciones que no excedan el 0,007 por ciento peso en peso.  POR ESO NO APARECE EN MUCHAS ETIQUETAS.






EL MERCURIO EN LA MEDICINA



   Los doctores han utilizado con frecuencia los compuestos de mercurio como medicamentos.

  • Calomel

Los médicos han usado el cloruro de mercurio (Hg2 Cl2), o calomel, por lo menos desde el siglo dieciséis para tratar la malaria y la fiebre amarilla. Una preparación llamada chocolate para gusanos o dulce para gusanos se le daba a los pacientes infestados con gusanos parásitos. Durante el siglo diecinueve e inicios del siglo veinte, muchos médicos siguieron usando calomel como purgante, catártico y estimulante hepático. A menudo los padres les daban a los lactantes polvos para la dentición que contenían calomel.
Los doctores siguieron recomendando el uso de calomel en la década de 1950 en Estados Unidos, el Reino Unido y en todas partes, para tratar la dentición infantil y la constipación. La exposición al mercurio por la ingestión de calomel causaba a menudo una enfermedad común entre los lactantes y los niños llamada acrodinia, o enfermedad rosada. En 1950 la acrodinia era responsable de más del 3 por ciento de las adminisiones en las salas de niños de los hospitales de Londres. Los registros estadísticos confirman la muerte de 585 niños por la enfermedad rosada entre 1939 y 1958, en Inglaterra y Gales. El calomel no fue retirado de la British Pharmacopoeia hasta 1958. La edición de 1967 del libro United States Dispensatory and Physicians’ Pharmacology incluye el calomel como un medicamento y no como un veneno. Después que se descontinuó el uso infantil de calomel, la enfermedad rosada prácticamente desapareció. 
Pero lo más interesante de todo es LA REAL PROCEDENCIA DEL CALOMEL, confirmado en el libro PHARMACOLOGIA, de John Aynton Paris: Se trata de un compuesto elaborado por el alquimista Oswall Crollius o Croll a principios de 1600, miren solamente los libros del muchachito... (y vemos que hasta hace poco nos los vendían como REMEDIO CIENTÍFICO):







  • Mercurocromo 

El antiséptico mercurocromo todavía se vende en las farmacias de muchos países y se aplica en los cortes y heridas para prevenir las infecciones.
Este antiséptico se comercializa bajo muchos otros nombres, incluyendo Merbromina, Cinfacromín, Mercutina, Mercurín, Mercrotona, Mercromina, Mercuresceine, Antisep, Super Cromer Orto, Brocasept y otros. El producto comercial contiene por lo general un 2 por ciento del compuesto de mercurio y bromo llamado merbromina (C20H9 Br2 HgNa2 O6) mezclado con agua o alcohol.

  • Timerosal 

El timerosal es un compuesto que contiene mercurio y que se utiliza para prevenir el crecimiento de bacterias y hongos. Otros nombres que se usan para este compuesto son mertiolato, mercurotiolato, ácido etimercuritiosalicílico, y 2-(etilmercuriotio) benzoato de sodio. La fórmula química del timerosal es C9 H9 HgNa O2 S.
El timerosal se usa ampliamente en las vacunas (ya lo mencionamos en la Parte 1) y puede usarse también en otras aplicaciones médicas como test cutáneos, gotas para los ojos y la nariz, y envases multi-uso para guardar soluciones, como los que se usan para los lentes de contacto. También se puede usar en tintas para tatuajes. 


USO DE MERCURIO EN LA MINERÍA ARTESANAL Y EN PEQUEÑA ESCALA



   La minería de oro, ya sea en gran escala o en pequeña escala, libera mercurio en el medio ambiente. Sin embargo, la mayor parte de las emisiones de la minería de oro en gran escala son el resultado de las impurezas de mercurio en el mineral de oro mismo. Por otra parte, los mineros en pequeña escala compran y utilizan mercurio elemental, que luego se libera en el medio ambiente durante el proceso de extracción y refinación del mineral. De todos los usos intencionales del mercurio, la minería de oro artesanal y en pequeña escala parece ser, con mucho, la mayor fuente mundial de contaminación por mercurio. Esta práctica también causa graves daños a los mineros y a sus familias y deteriora gravemente los ecosistemas locales y regionales.




   Los mineros artesanales de oro tienden a trabajar en forma individual o en pequeños grupos, en los lugares remotos donde existen los minerales que contienen oro. Luego de concentrar el oro mediante técnicas de separación tales como el lavado [en platones o bateas], los mineros mezclan con mercurio elemental la combinación restante de oro, tierra, arenas o sedimentos para concentrar más el oro y crear una amalgama de mercurio y oro. En seguida, los mineros quitan por presión el exceso de mercurio de la amalgama, a fin de separar con mayor rapidez la amalgama rica en oro.

   Los mineros calientan la amalgama, y al evaporarse el mercurio, queda un oro bastante puro. Este proceso permite que el minero quede en control del oro hasta que decida venderlo. También mantiene los costos al mínimo y el minero puede obtener su ganancia en cualquier momento.

   Para instalar una operación de minería artesanal de oro se necesita apenas un mínimo de conocimiento experto y de inversión. Con el precio del oro llegando a US$1.250 la onza, y el precio del mercurio aún relativamente bajo, la minería artesanal de oro resulta atractiva, especialmente en zonas de alta pobreza y desempleo, y de manera particular, entre personas que han sufrido desastres económicos o ambientales. La minería de oro en pequeña escala se practica en 55 países. El PNUMA calcula que entre 10 y 15 millones de personas de todo el mundo están involucradas activamente en la minería de oro en pequeña escala, y otros 85 a 90 millones de personas dependen indirectamente de ella. Los mineros en pequeña escala producen entre el 20 por ciento y el 30 por ciento de todo el oro que se extrae en la minería –aproximadamente 500 a 800 toneladas métricas de oro al año. Con frecuencia estas operaciones mineras son ilegales o no están reguladas, y los mineros habitualmente son pobres y tienen escasos o ningún conocimiento de los peligros de la exposición al mercurio.

   Algunas operaciones mineras en pequeña escala usan un proceso llamado amalgamación del mineral en bruto. El minero aplasta y muele el mineral en un molino y agrega mercurio a la mezcla. Después, solo una pequeña fracción de este mercurio se une al oro presente en la mezcla. El batido que hace el molino libera el resto del mercurio en el medio ambiente. Cuando la acción del molino aplasta el mineral, también reduce el tamaño de las gotitas de mercurio elemental que están en la mezcla. Se vuelven más y más pequeñas y luego son expulsadas del molino por el agua que fluye a través de él. La amalgamación del mineral en bruto parece ser el proceso más contaminante de toda la minería de oro y puede causar la exposición humana y la contaminación ambiental más graves de todas. Sin embargo, este método tiene un uso muy difundido entre los mineros porque el mercurio es barato comparado con el precio del oro, y con este proceso se obtiene un mercurio vendible (pagado de inmediato) con mínima mano de obra.

   Otra práctica común es lavar oro. Se usa el agua en un plato o batea para que se lleve los materiales más livianos y deje en el fondo las partículas más pesadas que contiene la tierra, la arena o el sedimento. Después, el minero agrega mercurio a estas partículas más pesadas para separar el contenido de oro.




   Con frecuencia los mineros usan una pala o una batea metálica sobre un fuego al aire libre para calentar la amalgama y recuperar el oro. Al hacer esto, se liberan directamente en el aire vapores de mercurio que los mineros, sus familias u otras personas en las cercanías pueden inhalar.

   Las encuestas de salud han encontrado altos niveles de mercurio en muchos mineros: algunos mineros han estado expuestos a niveles de mercurio más de 50 veces superiores a los límites de exposición establecidos por la OMS.

   En uno de los sitios incluidos en las encuestas, casi en la mitad de los mineros se observaron temblores no intencionales, un síntoma típico de daño inducido por el mercurio en el sistema nervioso central. Las familias de los mineros viven muchas veces alrededor de los lugares donde se calienta la amalgama. En sus ropas contaminadas, los mineros llevan consigo el mercurio a sus casas. El resultado es que las familias se ven frecuentemente expuestas.


EL MERCURIO EN OTROS PRODUCTOS



   Numerosos productos corrientes contienen mercurio o compuestos de mercurio. Durante la fabricación de estos productos, es frecuente que se libere mercurio en el aire (tanto dentro como fuera del lugar de trabajo) y también se libera a menudo como contaminante de los flujos de residuos sólidos y líquidos. Durante su uso corriente, los productos que contienen mercurio con frecuencia se rompen o bien liberan de alguna otra forma su contenido de mercurio en el medio ambiente. Y luego, al término de su vida útil, únicamente una fracción de todos los productos que contienen mercurio llega hasta los recicladores que se encargan de recuperar su contenido de mercurio. Frecuentemente los productos que se encuentran al término de su ciclo de vida van a parar a incineradores, a rellenos sanitarios o a vertederos. Dependiendo de las medidas de control de la contaminación del aire que se utilicen, los incineradores pueden liberar rápidamente en el aire el contenido de mercurio de estos productos fuera de uso. Los rellenos sanitarios y los vertederos liberan también en el aire gran parte del contenido de mercurio de estos productos, pero tienden a hacerlos más lentamente. De una u otra forma, gran parte del contenido de mercurio de los productos encuentra eventualmente la vía para entrar en el medio ambiente.

  • El mercurio de los instrumentos médicos




En hospitales y centros de atención de salud se han usado durante muchísimo tiempo instrumentos que contienen mercurio. Entre ellos están los termómetros para medir la fiebre, los instrumentos para medir la presión sanguínea (esfigmomanómetros) y los dilatadores esofágicos.
Cuando estos instrumentos se rompen, el mercurio que contienen puede vaporizarse y exponer a los trabajadores de la salud y a los pacientes.
El mercurio que escapa a causa de estas rupturas puede contaminar el área inmediata al derrame y también las descargas de aguas residuales del establecimiento. La ruptura de estos equipos es algo común. Los hospitales que usan termómetros de mercurio para medir la fiebre informan frecuentemente que reemplazan múltiples termómetros al año por cada cama hospitalaria. Una encuesta reportó que en un hospital de 250 camas, en un solo año se rompieron 4.700 termómetros de mercurio para medir la fiebre. 
Cada termómetro de mercurio para medir la fiebre contiene entre 0,5 g y 3 g de mercurio, mientras que un instrumento de mercurio para medir la presión sanguínea contiene por lo general entre 100 g y 200 g de mercurio. Un dilatador esofágico es un tubo largo y flexible que se desliza por la garganta de un paciente hacia el esófago, para ciertos procedimientos médicos. Aunque no son tan comunes como los termómetros para medir la fiebre y los instrumentos para medir la presión sanguínea, cada dilatador puede contener hasta un kilo de mercurio.
En 2007, el Parlamento Europeo aprobó leyes que prohibirán la venta en la Unión Europea de nuevos termómetros de mercurio para la fiebre y restringirán además la venta de otros instrumentos de medición que contengan mercurio.
Varios países europeos, entre ellos Suecia, Holanda y Dinamarca, ya prohibieron el uso de termómetros, instrumentos de medición de la presión sanguínea y una variedad de otros equipos que usan mercurio. En Estados Unidos, trece gobiernos estatales dictaron leyes que prohíben los termométros de mercurio y miles de hospitales, farmacias y compradores de instrumentos médicos cambiaron voluntariamente los instrumentos que contienen mercurio por termómetros digitales y por instrumentos aneroides y digitales para medir la presión sanguínea.  
Sin embargo, en la mayoría de los países en desarrollo y países con economías en transición, el reemplazo de los instrumentos médicos que contienen mercurio ha sido más lento. En algunos lugares hay poca conciencia de la necesidad de efectuar este cambio. No obstante, aunque crezca la conciencia de la necesidad de eliminar gradualmente los instrumentos para el cuidado de la salud que contengan mercurio, quedan tres importantes barreras que salvar:
• La desconfianza de las alternativas libres de mercurio por parte de algunos profesionales de la salud.
• Una oferta inadecuada de instrumentos libres de mercurio que sean precisos y tengan precios asequibles.
• La falta de programas nacionales, regionales o mundiales de fijación de estándares y de certificación de instrumentos, para garantizar que los instrumentos disponibles en el mercado nacional cumplan con los criterios aceptados en materia de precisión y comportamiento.




  • Otros tipos de instrumentos de medición:


Los siguientes son otros instrumentos de medición que contienen mercurio: 
• Los manómetros miden variaciones en la presión de gas. (Cada uno puede contener entre 30 g y 75 g de mercurio.) 
• Los psicrómetros miden la humedad. (Cada uno puede contener entre 5 g yo 6 g de mercurio.) 




• Los medidores de flujo miden el flujo de gas, agua, aire y vapor. 
• Los hidrómetros miden la gravedad específica de los líquidos.  
• Los pirómetros miden la temperatura de materiales extremadamente calientes. (Se usan principalmente en las fundiciones.) 
• Los barómetros miden la presión atmosférica. (Cada uno puede contener entre 400 g y 620 g de mercurio.)


El contenido de mercurio de todos los manómetros vendidos en Estados Unidos en 2004 fue de poco más de una tonelada métrica. Todos los demás instrumentos de medición indicados más arriba que fueron vendidos en Estados Unidos en 2004, tomados en conjunto, contenían 0,1 toneladas métricas de mercurio

  • Interruptores que contienen mercurio
Varios tipos de interruptores eléctricos contienen mercurio. Entre ellos están los interruptores de inclinación, los interruptores de flotador, los termostatos, los relés (relevadores) que controlan circuitos electrónicos, y otros. 119 En 2004, por ejemplo, en Estados Unidos se vendieron interruptores, termostatos y relés nuevos que contenían aproximadamente 46,5 toneladas métricas de mercurio elemental. Existen buenas alternativas para prácticamente todos ellos.

  • Interruptores de inclinación: Son interruptores que contienen pequeños tubos con contactos eléctricos en una punta. Cuando la punta del tubo con el contato eléctrico está inclinada hacia abajo, el mercurio fluye hacia esa punta y cierra el circuito. Cuando esa punta del tubo está inclinada hacia arriba, el circuito está cortado.
Los interruptores de inclinación se han usado habitualmente en los automóviles para controlar las luces de los portamaletas y en otros lugares. 
Cada interruptor contiene 1,2 gramos de mercurio elemental como promedio.


Se calcula que en 2001 los automóviles que circulaban por las carreteras de Estados Unidos contenían 250 millones de interruptores de inclinación.
En años recientes, casi todos los fabricantes de automóviles dejaron de poner interruptores de inclinación en los vehículos nuevos.


  • Interruptores de flotador: Se utilizan comúnmente para hacer funcionar bombas y controlar el nivel de un líquido. Un interruptor de flotador es un flotador redondo o cilíndrico con un interruptor unido a él. El interruptor opera una bomba y la enciendo o apaga cuando el flotador se levanta sobre, o se hunde bajo, una altura determinada. Un interruptor de flotador individual puede contener apenas 100 mg de mercurio o tanto como 67 g.


Los interruptores de flotador pequeños se usan en las bombas de sumideros para evitar que se inunden los sótanos. Los de mayor tamaño se utilizan en los sistemas municipales de alcantarillado, también se usan como controles para bombas de irrigación, y en muchas aplicaciones industriales. Existen alternativas disponibles, a precios similares, para los interruptores de flotador.





  • Termostatos: Se utilizan en el hogar y en otros lugares para controlar los artefactos de calefacción o enfriamiento. Hasta hace poco, la mayoría de los termostatos contenía mercurio. Los termostatos de mercurio tienen espirales bimetálicas que se contraen y expanden con la temperatura ambiente.





Cuando la espiral se contrae o se expande, activa un interruptor de mercurio y abre o cierra un circuito que hace que un horno, bomba de calor o acondicionador de aire se encienda o se apague. La cantidad promedio de mercurio de un termostato residencial análogo es de aproximadamente 4 g. 
Los termostatos industriales pueden contener mucho más mercurio.

  • Relés que contienen mercurio: Son dispositivos que abren o cierran contactos eléctricos para controlar otros disposivos. Los relés se usan con frecuencia para conectar o desconectar grandes cargas de corriente eléctrica, al aportar corrientes relativamente pequeñas a un circuito de control.
Entre los relés que contienen mercurio están los relés de desplazamiento de mercurio, los relés con lengüeta de contacto sumergida en mercurio y los relés de contacto de mercurio.
Los relés se encuentran en las computadoras notebook y en las fuentes de alimentación para computadoras, en copiadoras, cargadores de baterías, calefactores y hornos, hornos industriales, faroles del alumbrado público y señales de tránsito, equipo quirúrgico y máquinas de rayos X, equipos aeronáuticos, voltímetros y ohmetros, controles para las herramientas eléctricas, equipo para minería, calefactores de piscinas, máquinas para depuración en seco, tableros de circuitos eléctricos, controladores lógicos programables y muchas otras aplicaciones. En 2004, los nuevos relés que salieron al mercado en Estados Unidos contenían 16,9 toneladas métricas de mercurio.




Existen muchos tipos de interruptores y relés que contienen mercurio, aparte de los descritos arriba. Entre ellos están los interruptores de presión y temperatura, interruptores sensibles a las llamas, interruptores de lengüeta, interruptores de vibración y otros.


  • El mercurio en las pilas y baterías
El uso principal del mercurio en las pilas y baterías es el de prevenir la acumulación de gas de hidrógeno que hacer que la batería se hinche y gotee.
Según un informe de la Unión Europea, el contenido total de mercurio de las baterías vendidas en Estados Unidos y en los países de la Unión Europea en el año 2000 fue de 31 toneladas métricas. Ese mismo año, el contenido de mercurio de las baterías vendidas en el resto del mundo fue de 1.050 toneladas métricas.
Las pilas con el mayor contenido de mercurio son las pilas de óxido de mercurio, que tienen un 40 por ciento de mercurio por peso. Estas pilas son apreciadas por tener una densidad de alta energía y una curva de voltaje plana y se han utilizado en aplicaciones tales como audífonos para sordera, relojes, calculadoras, cámaras electrónicas, instrumentos de precisión e instrumentos médicos. Sin embargo no hemos podido encontrar evidencia de que las pequeñas pilas de óxido de mercurio se sigan produciendo en alguna parte del mundo. Por otro lado, las pilas de óxido de mercurio de gran tamaño aún se producen para aplicaciones militares y médicas y en equipos industriales, donde una corriente estable y una larga vida útil son consideradas esenciales.




Las baterías que contienen mercurio, aparte de las pilas de óxido de mercurio, usan el mercurio para inhibir la formación de gases al interior de la batería y evitar las fugas. La mayoría de las baterías alcalinas en el mercado mundial ya no contienen mercurio. La excepción principal son las pilas de botón alcalinas.
Las pilas de botón son pequeñas baterías que se usan en audífonos para la sordera, relojes, juguetes, baratijas y otros artículos portátiles, pequeños.
Muchas de estas baterías contienen mercurio. Las cuatro tecnologías principales de pilas de botón son: de zinc-aire, de óxido de plata, de manganeso alcalino y de litio. Las pilas de botón, de litio, no contienen mercurio. Por otro lado, las pilas de botón de zinc-aire, de óxido de plata y alcalinas de manganeso contienen habitualmente desde un 0,1 por ciento hasta un 2,0 por ciento de mercurio por peso. Muchas de estas baterías salen al comercio a través de la venta de productos con la batería ya incorporada. Por ejemplo, en 2004 se distribuyeron 17 millones de juguetes Hombre Araña en las cajas de cereales para el desayuno que se vendieron en Estados Unidos. Se calcula que esta sola campaña de promoción puso en circulación 30 kilos de mercurio.



Una agradable sorpresa aguarda a quien esté dispuesto a sacarle las tripas a una pila de 12 voltios. ¿Alguna vez se ha sentido estafado al cambiar la pila de una calculadora? Utilizan esas pilas de botón tan pequeñas y monas que venden a precios desorbitados. Una pila de 12 voltios cuesta la mitad o menos y en su interior hay ocho pilas de 1,5 voltios de tamaño botón. 


  • El mercurio de las lámparas fluorescentes 
El mercurio se usa en una variedad de lámparas y contribuye a su funcionamiento eficiente y a su expectativa de vida. Las lámparas fluorescentes y otras lámparas que contienen mercurio son por lo general mucho más eficientes energéticamente y de mayor duración que las lámparas incandescentes y otras formas de iluminación equivalentes.
Las lámparas fluorescentes –incluyendo los tubos fluorescentes y las lámparas fluorescentes compactas (LFC)— tienen, con mucho, la mayor cuota de mercado de todas las lámparas que contienen mercurio. Las lámparas fluorescentes contienen por lo general menos mercurio que otras lámparas de mercurio, y el contenido promedio de mercurio de cada lámpara fluorescente individual ha ido disminuyendo. Sin embargo, debido a su gran cuota de mercado, se calculó que las lámparas fluorescentes representan aproximadamente el 80 por ciento del total del mercurio que se usa en iluminación.
Una lámpara fluorescente es un tubo de vidrio recubierto con fósforo, que contiene mercurio y tiene electrodos localizados en ambos extremos. Cuando se aplica voltaje, los electrodos energizan el vapor de mercurio en el interior del tubo y esto hace que emita energía ultravioleta (UV). El recubrimiento de fósforo absorbe la energía UV y emite luz visible. El mercurio es un componente esencial de todas las lámparas fluorescentes. 
Esto tiene cosas a favor y cosas en contra:
Las lámparas fluorescentes compactas de bajo consumo requieren menos electricidad y permiten reducir el nivel de emisiones de las centrales eléctricas. Porque tenemos que el carbón contiene mercurio, que se libera en el medio ambiente cuando se quema el carbón. La mayoría de los países depende de las carboeléctricas para generar una parte importante de la energía que usan. Como resultado de ello, las medidas que disminuyen el uso de electricidad pueden disminuir las emisiones de mercurio de las carboeléctricas. Sin embargo, esto no quita el hecho de que estas lámparas contienen, por sí mismas, mercurio.




Cuando una lámpara fluorescente se rompe, el nivel de vapor de mercurio en el aire de la habitación puede ser, por un breve momento, relativamente alto, pero el vapor se transforma rápidamente en pequeñas gotas que pueden adherirse a las superficies o al polvo durante algún tiempo, especialmente si la habitación no está bien ventilada o si no se ha limpiado a fondo. Así, el mercurio podría ser inhalado o ingerido por las personas presentes en la habitación.
Consideremos una lámpara fluorescente compacta (LFC) de 14 watts que se usa para reemplazar una bombilla incandescente de 60 watts. La LFC de 14 watts y la bombilla incandescente de 60 watts producen aproximadamente la misma cantidad de luz. En Estados Unidos la vida promedio de una LFC es de aproximadamente 20.000 horas. Durante este promedio de vida, la LFC consumirá 280 kilowat horas (kWh) de electricidad. En el mismo período, una bombilla incandescente de 60 watts consumirá 1.200 kWh de electricidad. Al sustituir una bombilla incandescente de 60 watts por una LFC de 14 watts, en las condiciones prevalecientes en Estados Unidos, se pueden ahorrar, en promedio, 920 kWh de consumo de electricidad durante la vida de la LFC.
En Estados Unidos, una central eléctrica a carbón, de tamaño promedio, emite aproximadamente 0,0234 mg de mercurio en el aire por cada kilowatt hora de electricidad que genera. Si partimos del supuesto de que una casa en Estados Unidos obtiene toda su electricidad de una central eléctrica a carbón, de tamaño promedio, observamos que el hecho de reemplazar una bombilla incandescente de 60 watts por una LFC de 14 watts reduce las emisiones de mercurio de la termoeléctrica en 21,5 mg como promedio.


Además, si tomamos en cuenta toda la contaminación por mercurio asociada al ciclo de vida de las luces fluorescentes, tenemos que considerar no sólo el contenido de mercurio de la lámpara y la contaminación causada al término de su vida útil, sino también la contaminación por mercurio asociada a la actividad minera para extraer el mercurio que va a la lámpara y la contaminación por mercurio asociada a la producción de la lámpara. Afortunadamente se están desarrollando nuevas lámparas energéticamene eficientes que no contienen mercurio. La tecnología de diodo emisor de luz (LED) es la más prometedora. La iluminación LED se está empezando a comercializar, pero aún es relativamente cara. Sin embargo, como sucede con todas las nuevas tecnologías, se puede esperar que los costos bajen con el tiempo. Los vendedores señalan que las bombillas LED que están apareciendo en el mercado no contienen mercurio, proporcionan un 77 por ciento de ahorro frente a las bombillas incandescentes, duran 25 veces más, son frías al tacto y ofrecen un brillo completo desde el momento.


Medidas de limpieza recomendadas ante una rotura
Debemos sumar a las medidas de prevención algunas normas, como las establecidas por la mencionada Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), en caso de rotura de las lámparas de bajo consumo.

•Antes de la limpieza: airee la habitación como mínimo durante 15 minutos, abandonando el lugar o habitación.•Las personas y los animales domésticos deben abandonar de inmediato la habitación sin que nadie camine, al salir, por la zona de la rotura.•Apague el sistema central de calefacción o de aire acondicionado, en caso de que los haya.
Medidas para reforzar la limpieza de superficies duras

•Preferentemente con guantes y barbijo. Recoja cuidadosamente los trozos de vidrio y polvo, usando un papel rígido o cartón, y colóquelos en un frasco de vidrio con tapa de metal —por ejemplo un tarro de conservas— o en una bolsa de plástico sellada (las manos y la piel no deben tomar contacto con el polvo desparramado).•Utilice una cinta adhesiva para recoger los restos de los fragmentos de vidrio y polvo más pequeños.•Limpie el área afectada con toallas de papel húmedo o toallitas húmedas desechables y luego deposítelas en un frasco de vidrio o bolsa de plástico.•No use aspiradora ni escoba para limpiar la bombilla rota sobre superficies duras.
En caso de que la habitación posea alfombras:




•Recoja cuidadosamente los fragmentos de vidrio y colóquelos en un frasco de vidrio con tapa de metal o en una bolsa de plástico sellada. (usar guantes y barbijo, las manos y la piel no deben tomar contacto con el polvo desparramado).•Utilice cinta adhesiva para recoger los restos de los fragmentos de vidrio y polvo más pequeños.•Si es necesario pasar la aspiradora, una vez que los materiales visibles hayan sido retirados, pásela por el área donde la bombilla o tubo se rompió.•Retire la bolsa de la aspiradora —vacíe y limpie el filtro además— y ponga ésta o los desechos en una bolsa de plástico sellada.
Pasos a seguir para la limpieza de ropa, ropa de cama y otros materiales blandos:

•Si la ropa u otros materiales de la cama entran en contacto directo con el vidrio roto o el polvo de mercurio contenido en el interior de la bombilla o tubo fluorescente, debe tirarla. No lave la ropaporque los fragmentos de mercurio en la ropa pueden contaminar la máquina y/o las aguas residuales.•Sí puede lavar la ropa y aquellos otros materiales que hayan estado expuestos al vapor de mercurio; por ejemplo, la que llevaba cuando limpió la lámpara o tubo fluorescente roto. Pero siempre que las prendas de vestir no hayan entrado en contacto directo con los materiales de la bombilla rota.•Si los zapatos entran en contacto directo con los vidrios rotos o con el polvo de mercurio contenido en la bombilla, límpielos con toallas de papel húmedo o toallitas húmedas desechables. Luego coloque las toallas o paños en un frasco de vidrio o bolsa de plástico hermética para su eliminación.
Eliminación de los materiales de limpieza

•Coloque de inmediato todos los materiales de limpieza al aire libre en un contenedor de basura.•Lávese bien las manos tras deshacerse de los frascos o bolsas de plástico --bien cerrados-- que contengan los materiales de limpieza.•Se debe solicitar o exigir que los Municipios implementen medidas adecuadas para el manejo y disposición final de las lámparas de bajo consumo y tubos fluorescentes, y para que las mismas sean tratadas como Residuos Peligrosos, dado su contenido de mercurio.

   Como comentario personal, he estado leyendo y viendo los videos en contra de las lámparas de bajo consumo y veo que son todos "hijos" de un cierto documental que anda por la red, LUZ TÓXICA (y otros títulos que le han dado a las diferentes copias), y SINCERAMENTE ENCUENTRO PATÉTICO QUE PERSONAS QUE DICEN ESTAR EN EL TEMA DE LA CONSPIRACIÓN DESDE HACE TIEMPO PUEDAN CAER EN UN SIMPLE DOCUMENTALUCHO SIN SOPORTE. En todo el documental no aparece el nombre y /o estudios (ficha técnica) de los "supuestos científicos" que aparecen sentados dando consejos, por no mencionar que no se documenta el caso del niño al cual terriblemente se le cayó el pelo porque una lámpara de bajo consumo se rompió dentro de su casa. 

   SEÑORES, la EPA (Environmental Protection Agency) indica que hay que salir y ventilar el local por 15 minutos... PERO LA CASA DE ESTA BUENA GENTE QUEDÓ INHABITABLE!!! Vamos...


Sinceramente les pregunto:

¿A CUÁNTOS DE USTEDES NO SE LES HAN ROTO, NO UNA, SINO MUCHAS DE ESTAS LÁMPARAS? A MÍ PERSONALMENTE SE ME HAN ROTO UNAS CUANTAS, ¡Y LES JURO QUE NO USO PELUCA! Es cierto que contienen mercurio y es cierto que el mercurio es tóxico, PERO SON MUCHO MÁS TÓXICAS LAS AMALGAMAS DE MERCURIO QUE UNA LAMPARITA QUE SE ROMPE EN UNA HABITACIÓN. Señores, este asunto merece un puesto de honor al lado de la teoría del calentamiento global, con foto de Al Gore incluida.

   Y como ya se ha demostrado más arriba, a pesar de ese peligro de toxicidad (QUE NO SE DEBE AL PRODUCTO EN SÍ mientras se lo cuide, SINO A UN CASO DE ACCIDENTE O NEGLIGENCIA, basta ser suficientemente cuidadosos o en caso de que se rompa, SALIR DE LA HABITACIÓN, caramba, ¡QUE MUCHOS PEORES METALES NOS LARGAN EN LOS CHEMTRAILS TODOS LOS DÍAS Y NADIE DICE NI MU!), a pesar de eso resulta ser MUCHÍSIMO MENOS TÓXICO QUE LA CONTAMINACIÓN PRODUCIDA POR UNA CENTRAL ELÉCTRICA A CARBÓN. 

   Esto es querer disfrazar los niveles de mercurio que están en la atmósfera gracias a sus emisiones, echándole la culpa como siempre a... usted, querid@ lector@, que es un irresponsable manos de manteca que anda por la vida quebrando lamparitas y contaminando el planeta...






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¿Está usted listo espiritualmente? ¿Lo está su familia? ¿Está usted protegiendo adecuadamente a sus seres queridos? Esta es la razón de este ministerio, permitirle a usted primero entender el peligro que enfrenta, y luego ayudarle a desarrollar estrategias para advertir y  proteger a sus seres queridos. 
Si usted ha aceptado a Yahshua ha'Mashiaj como su Salvador personal, pero ha sido muy tibio en su caminar espiritual con Él, necesita pedirle inmediatamente perdón y renovación. Él lo perdonará y llenará su corazón con el gozo del Espíritu Santo. Entonces, necesitará reiniciar un caminar diario de oración y estudio personal de la Biblia. 
Si usted nunca ha aceptado a Yahshua ha'Mashiaj como su Salvador, pero ha comprendido Su realidad y el Fin de los Tiempos que se acerca, y quiere aceptar Su regalo GRATIS de la Vida Eterna, usted puede hacerlo ahora, en la privacidad de su hogar. Una vez lo acepte como Salvador, usted habrá Nacido de Nuevo, y tendrá el Cielo tan seguro como si ya estuviera allí. Entonces, podrá descansar seguro de que el Reino del Anticristo no lo tocará espiritualmente. 
Si a usted le gustaría Nacer de Nuevo, vaya ahora a nuestra Página de Salvación
Esperamos que haya sido bendecido por este ministerio, que busca educar y advertir a las personas, de modo que puedan ver el Nuevo Orden Mundial que está por llegar (el Reino del Anticristo) en sus  noticias diarias. 




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Publicado por: Anunciadora de Sión
SOY CREYENTE EN YAHSHUA
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